Nicaragua tiene más de siete meses de estar en una crisis social, política y económica que ha dejado graves consecuencias a la vida y la paz en este país. Este período ha estado, particularmente, marcado por la sistemática y recurrente violación a los derechos humanos de la ciudadanía, así como la dificultad para acceder a datos precisos sobre la cantidad de casos.
En ese sentido, la información disponible ha sido recogida mediante el trabajo “in situ” y la recepción directa de denuncias por parte de organismos de derechos humanos, tales como el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH), la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH) y la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH), así como informes elaborados por organismos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Amnistía Internacional (AI) y organismos estatales, como la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos y la Comisión de la Verdad, Justicia y Paz nombrada por la Asamblea Nacional de Nicaragua.
Todas estas organizaciones cuentan con sus propios datos, los cuales difieren uno del otro. Hasta la fecha, por la falta de información confiable a nivel estatal y las limitantes que el mismos Estado ha puesto a los organismos antes mencionados para la realización de su trabajo, no se han podido confirmar todos los casos denunciados, más allá de las cifras que presenta cada organismo.
Siendo éste, uno de los principales retos para dimensionar la situación de violación a los derechos humanos en el período del 18 de abril al 18 de noviembre 2018, se presenta este primer informe correspondiente a un esfuerzo por sistematizar la información disponible en materia de violaciones a los derechos humanos y que ha sido presentada por los organismos antes mencionados, graficando esta realidad de manera sencilla, completa, dinámica y útil para que las personas de Nicaragua y otros países conozcan la realidad del país.